Como en cualquier otro ámbito de la vida, cuanto más tiempo inviertas en escribir una carta de presentación, más probable será que te devuelva sus frutos en el futuro. Por supuesto, puedes seguir las pautas básicas sobre qué formato debe tener una carta de presentación y qué incluir en esa carta de presentación, pero hay muchos más aspectos que debes tener en cuenta.

Escribir una carta de presentación que realmente deje un impacto en el empleador requiere tiempo, esfuerzo y creatividad.

En este artículo destacaré algunos de los consejos y recursos más útiles para escribir una carta de presentación que haga más fácil el proceso y te ayude a desmarcarte de la competencia.

Investiga la información más importante

A menudo se dice que debemos escuchar antes de hablar, un viejo principio que puede aplicarse también en este caso.

Por contradictorio que parezca, el proceso de escritura de una carta de presentación empieza sin escribir nada en absoluto.

Se trata más bien de hacer una investigación exhaustiva que conseguirá convencer al empleador de que entiendes y valoras a la empresa.

Durante esta investigación, tendrás que asegurarte de identificar los siguientes tres factores:

Valores fundamentales

Empieza por encontrar los valores fundamentales de la empresa. Algunas empresas ya te hacen el trabajo y describen sus valores en su web, pero copiar y pegar estos valores en tu carta de presentación no impresionará a tu posible empleador. En vez de eso, trata de identificar valores y principios fundamentales que no se comuniquen explícitamente a la audiencia, sino que los tengas que buscar tú a través de sus servicios, contenido o clientes que atraiga su marca.

Una manera divertida de identificar palabras clave que te puedan dirigir hacia valores fundamentales es crear una nube de palabras. Se trata de una imagen con palabras de distintos tamaños que se encuentran dentro de un párrafo. Puedes copiar una página relevante de texto de la web de la empresa en cuestión y pegarla en WordItOut.

Elegir un par de palabras de esa nube puede ayudarte a empezar con la búsqueda de conceptos clave referentes al negocio. Usar este recurso te servirá como guía para saber qué tipo de valores y palabras clave podrías incluir en tu carta de presentación.

Áreas de debilidad

Todos tenemos debilidades y, lo creas o no, también las tiene la empresa que esperas que te contrate. Invertimos mucho tiempo en conocer las fortalezas de una empresa y lo que la hace valiosa, pero deberíamos dedicarle el mismo tiempo a entender en qué ámbitos se queda corta. Si lo hacemos así, podemos proponernos a nosotros mismos como solución a esas deficiencias en nuestra carta de presentación, de forma estratégica.

Puntos de contacto

Como se trata de una carta, tiene que ir dirigida a alguien o a algo. Por tentador que sea escribir simplemente «A quien corresponda», no tiene el mismo impacto que dirigirte al empleador directamente por su nombre.

Encontrar al director de contrataciones es tu mejor apuesta. Si no sale su nombre en ninguna lista de su web o en la descripción del puesto, puedes valerte de LinkedIn, que es un gran recurso. Esta página web te permite buscar a la empresa y descubrir a personas que trabajen allí. A menudo encontrarás «director de contrataciones» en la descripción de alguno de los integrantes de la empresa. Pero si aun así no estás muy seguro, puedes mandarle un mensaje a alguien que parezca tener un cargo similar al que optas y preguntarle si sabe quién sería el mejor contacto.

Si nada de esto funciona, siempre puedes llamar a la empresa para preguntar por ese nombre. Puede parecer tedioso pero, a fin de cuentas, que el lector de tu carta se sienta interpelado directamente marcará la diferencia por completo.

 

Escribe la carta de presentación con intención

Ahora que ya has realizado todo el proceso de investigación, es hora de convertir todas esas piezas en una carta de presentación que demuestre que estás verdaderamente interesado y cualificado para el puesto. Por supuesto, tendremos que suponer que también lo están todos los demás que solicitan el trabajo. Por lo tanto, ¿cómo puedes sobresalir?

A continuación te dejo un par de consejos que debes tener en cuenta para escribir una carta de presentación.

 

Evita las expresiones robóticas

Los directores de contratación leen muchas cartas de presentación cada día, por lo que se darán cuenta si copias y pegas formalidades en tu carta. Por eso, deberás evitar frases de las que se abuse mucho, como «sería un buen candidato porque…», «tengo experiencia en…» o «me interesa el puesto porque…». Son expresiones demasiado comunes en las cartas de presentación y es probable que el director de contratación solo le eche un vistazo por encima si en tu carta ve estructuras idénticas a las de las otras cincuenta que se tiene que leer.

En su lugar, utiliza la carta de presentación como una oportunidad para mostrar tu personalidad mediante la escritura. No tengas miedo de explicar una historia a través de la carta de presentación y desmarcarte así del estilo de escritura más típico. Aun así, recuerda que siempre es importante ceñirse al tema y centrar la carta de presentación en las ventajas que tiene contratarte a ti para el beneficio de la empresa.

Escribe sobre habilidades en vez de sobre experiencia

Puede resultar tentador resumir tu currículum describiendo en cada párrafo tus cargos anteriores. Sin embargo, esto no te ayuda a posicionarte como el candidato perfecto para el puesto. Mejor inténtalo con párrafos dedicados cada uno a un conjunto de habilidades concreto.

Por ejemplo, si quieres solicitar un puesto de asistente legal, primero tendrás que echar un vistazo a la descripción del trabajo e identificar de dos a tres habilidades que te parezcan especialmente importantes para tener éxito. Pongamos que quisieras incluir la atención al detalle, la gestión del tiempo y la fiabilidad como tus tres habilidades. En cada uno de los párrafos justificativos, explícale al director de contratación cómo desarrollaste esa habilidad en tus anteriores puestos. De esta manera, puedes incluir varios puestos de trabajo en un solo párrafo siempre que se refieran a la habilidad que describes.

Este artículo te puede ayudar con una lista de habilidades transferibles que puedes elegir para escribir tu carta de presentación.

 

Acaba con una llamada al valor

Seguramente hayas escuchado hablar de la famosa «llamada a la acción», pero ¿has oído hablar de una «llamada al valor»? En vez de enunciar solo una acción, una llamada al valor invita al lector a dar el siguiente paso, porque le aportará algo que es de valor. Aquí tienes un ejemplo de llamada al valor:

Llamada a la acción: «Aceptaré con agrado la oportunidad de conversar con usted acerca de mis cualificaciones. Gracias por su tiempo.»

Llamada al valor: «Aceptaré con agrado la oportunidad de conversar con usted acerca de cómo puedo aplicar mis habilidades para gestionar los conflictos y promover el cambio como nuevo jefe de equipo. Gracias por su tiempo.»

Terminar con una llamada al valor recuerda al lector por última vez cómo le puedes beneficiar y por qué debería contactar contigo. Es tu última oportunidad para impresionarle, así que asegúrate de ser claro, convincente y memorable.

 

Comparte tu experiencia: ¿cómo redactas tus cartas de presentación?

¿Cómo escribes tú las cartas de presentación? Si tienes alguna sugerencia o idea acerca de cómo escribir cartas de presentación, ¡siéntete libre de compartirla! O, si pruebas alguna de estas técnicas, ¡haznos saber cómo te ha ido!